San Pedro de Macorís alza la voz: investigación inmediata a la gestión del síndico Raymundo Ortiz y su mano derecha (la contralora en materia económico Dioselina De La Cruz
San Pedro de Macorís vive un momento histórico.
Lo ocurrido con SENASA donde presuntas irregularidades obligaron al Ministerio Público a actuar sin titubeos dejó una enseñanza clara: cuando hay sombras, la justicia debe entrar con luz, sin miedo y sin favoritismo.
Ese precedente retumba hoy en cada sector de la Sultana del Este.
Y el pueblo lo dice claro:
Si SENASA fue investigado, el Ayuntamiento de San Pedro de Macorís también debe serlo.
La exigencia es directa y sin rodeos:
investigación urgente, profunda y completa a la gestión del síndico Raimundo Ortiz y a sus funcionarios más cercanos.
Este nuevo reclamo ciudadano se convierte en una fuerza imparable que crece cada día.
Y en primera línea está Documentales Reales S.A., dirigida por el periodista y escritor Cesáreo Silvestre, acompañada por juntas de vecinos, asociaciones comunitarias, líderes religiosos, comerciantes, organizaciones sociales y voces independientes comprometidas con la verdad.
Pero esta vez, el llamado no es solo a la comunidad.
Es un llamado a los partidos políticos opositores:
que dejen de mirar desde la barrera, que levanten la vista, que pongan a un lado sus rivalidades y que se unan al clamor del pueblo.
Porque la transparencia no tiene colores ni banderas.
La corrupción si la hay no respeta partidos.
Y la defensa del patrimonio municipal es un deber de todos.
San Pedro de Macorís exige:
1. Una investigación inmediata de PEPCA.
2. Una auditoría total de la Contraloría General de la República.
3. Revisión de obras, compras, contratos y uso de fondos municipales.
4. Claridad pública sobre quién decidió qué, cuándo, cómo y por qué.
El pueblo está cansado de rumores, cansado de murallas de silencio, cansado de que la transparencia sea una promesa y no una realidad.
Hoy la población reflexiona, despierta y se pregunta:
¿Hasta cuándo los recursos del pueblo serán manejados sin la claridad que la ley exige?
¿Hasta cuándo el Ayuntamiento funcionará sin rendir cuentas con precisión?
¿Hasta cuándo los verdaderos servidores públicos se quedarán callados por miedo o conveniencia?
San Pedro de Macorís no quiere persecuciones.
Quiere verdad.
No pide caos político.
Pide justicia.
No busca escándalo.
Busca transparencia.
La comunidad lo grita con fuerza:
Basta ya de opacidad. Basta ya de silencio. Es tiempo de abrir los libros, revisar las cuentas y demostrar que la ley es para todos.
Los partidos políticos opositores son llamados a cumplir su rol histórico:
apoyar, exigir, fiscalizar, levantar la voz y acompañar a un pueblo que no se rinde.
No es momento de tibiezas.
No es momento de cálculo político.
Es momento de carácter.
San Pedro de Macorís ya despertó.
El reloj moral de la ciudad marcó la hora:
la hora de la verdad.
Y la presión seguirá hasta que la investigación sea una realidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario